domingo, 20 de marzo de 2011

Punctum

Extremum verbum

Harta estoy ya de dar gritos
Cansada de enfrentar las sombras hipócritas de los clandestinos parias de la mentira amarga
Los esqueletos complejos del utópico sino
Escribiendo estaba una retórica blanca a nuestra poesía dedicada
Mas tuve que hacer un alto y levantar nuevamente mi pluma
Cual espada blanda haciendo un surco en la tibia espuma
Vuelven a sorprender los motines insulsos
Apabullados y huecos insultos
Donde la ética moralista literaria
Queda ultrajada cual inocente niña enclaustrada
Nos cantamos de ser quienes llevamos amor envuelto en mantos de Gregorio
Cuando en realidad nos embarcamos en luchas sangrientas
Cuales cruentos gladiadores en busca de paga por gloria y nombre en las estrellas
No nos fijamos en cuanto daño hacemos a los que crecen a nuestros lados
Quienes nos ven como ejemplar ejemplo
A quienes estamos mal educando tras nuestros rastros traicioneros
Hace tropiezos ha les cuestionaba
Aun con lágrimas en los ojos recuerdo
¿Qué dirían los ancestros de esto que nos está consumiendo hasta los huesos?
Góngora se enfrentaba a Lope
Lope contra el gordo escribía
Pero aun dentro de estas batallas en las rimas
Podemos encontrar respeto y valor entre sus riñas
Mas hoy
Escribí un punto en mi desenfreno
Yo que solo en comas y suspensivos derramo mis alocados versos
Un punto pues he decidido acotar mi apología
No pienso soplar después de estos mismos
Un verso inhóspito por estos desleales sucesos de utopía
Un punto.
No más deterioro en mis raíces.
Alimentaré mis violetas nostalgias con azules
Ámbares y escarlatas rubíes
Un punto.
No blandiré mi espada en contra de fronterizas meretrices.
Seré quien enjugue sus perlas cuando estas cansadas regresen de sus rabietas de las cavernas
Un punto.
Me rehuso vitalmente a trazar sobre mi lienzo grietas por donde se escurran vahos de muerte y vilipendio.
Estas dos señoras las sacaré a paseo sólo cuando contra ellas mismas descubra el espejo de mi estruendo
Un punto.
Dejaré libremente volar los murciélagos ciegos del paradójico secreto.
Total, ellos mismo por su peso caerán
Veremos sus cuerpos flotando inertes sobre el sereno
Un punto.
Decido pletóricamente olvidar y obviar todo injurio, vituperio y dramatismo antagónico.
¿Quién soy yo para como justa juez enjuiciar a alguien que realmente no conoce las membranas de mi andar?
Solo me queda perdonar y recapacitar
Un punto.
Renuncio a ser llamada poeta.
Esto es redundando en la redundancia eterna de mis letras
Esta vez no porque no lo sea
Pues soy lo que soy ante todos
Y entre las piedras
Renuncio a esta mi verdad
Pues me avergüenza lo que nos está destruyendo la colmena
Estoy ya por terminar
Hago un llamado enérgico a sus conciencias
En este universo hay espacio demás para nuestro versar
Porque perder el tiempo en dilemas de falsa grandeza
Después de todo estos traspiés
Quedamos todos en ridículo
Al dejarnos envolver en estos dramas sin pie ni destino
Pudimos haber escrito juntos un perfecto poema a los niños
Quizás pudimos haber escrito un soneto con sabor a heráldica quimera
Quien sabe si hubiésemos logrado un canto de esperanza etérea
O una leyenda que sobrenaturalmente trascendiera
Pero no fue así
Tristemente decidimos agarrarnos por las trenzas
Tratando de ver quien era quien
En las cortes furibundas de una realeza muerta
Hoy...
En la comodidad de esta jaula sin puertas
Solo ventanas
Y ventanas abiertas a quienes se sinceren en las letras
Preparo un delicioso café
Escribo un poema blanco
A la poesía de los poetas
Poetas con alma de poesía
Pues cansada estoy de chismes
Dramas, envidias y algarabías
Comencemos a respetar las matrices ajenas
Respetemos la sagrada tinta que nace en los otros poemas
Hoy escribo un punto.
No volveré a tocar este tema


Viento Serena
(Lala©2011)

jueves, 3 de marzo de 2011

Coronando con rubíes, zafiros y esmeraldas, la notoria esencia de su nostalgia

Corona de Nostalgia

Craso cielo desnudo de sortilegios
Bandada de libélulas de cristal biselado
Gaviotas perfumadas con violetas y nardos
Mar azul vestido con pétalos de espuma
Y el sol...
Corona con sus clandestinos rayos flabelados
La cadenciosa silueta de mi nostalgia

Emerge del epicentro oceánico de una mirada
Mariposas y calandrias pululan entre sus ondas
Mientras ella camina descalza
Sobre la espuma perlada del mar que la abarbecha
Dejando su matriz lista para ser fecundada
Por los puros besos que le aquilatan el alba

Como el Phoenix plateado
De las cenizas se regenera íntegra
Siempre como digna quimera
Pero con mas deseos y fuerzas
Abandonando los pasados que una vez la cautivaron
A la agónica angustia de la penumbra

Crece y se recrece
Mientras sus diminutas alas de azul cristal
Se destuercen y fortalecen
Ramificándose en su despliegue de verbos
Externalizando los sentires de su franco pecho
Mientras los difumina gracilmente
En la interna gama de colores eternos y permanentes

Y es que el regreso al dolor del dolor
Levanta en ella esperanzas en el amor
Muros rígidos cercando la pasión
Atalayas en sólido acero
Para cuidar su nido de los buitres y sus desaciertos
Hábilmente defiende con sus sintagmas
El anhelo a vivir libremente
Y amar persistentemente

Ella, mi Nostalgia sagrada
Ha descendido a las fauces del averno dividido
Quitando de las garras del demoniaco silencio
Las llaves celestiales que abren las puertas y ventanas
De los paraísos ancestrales
En los que sólo la luz se luce
Y la verdad viste las violetas orquídeas Que adornan los umbrales

La muerte para ella no es punto y a parte
Se ha sentado con ella a la mesa
Han abierto el vino
Comparten sus versos
Escriben rimas proverbiales
Haciendo entrambas un pacto
Sellando sempiternamente su consigna
Enredando sus letras con sus pensares

Ya la luna viste su hermosura
Las estrellas hilvanan los velos de su fortuna
Murciélagos blancos se posan en su cuerpo eternizado
Cuando de sus rizos descienden siete perlas
Para bordar la manta que cubre su realeza
Mientras mis libélulas de azul cristal
Duermen taciturnas
Sobre la fecunda matriz de su ternura

Raso cielo plagado de de sortilegios
Mariposas en cadena sobre los ojos de su quimera
Calandrias que perfuman con sus trinos de gardenias
Violáceo mar bravío desnudo de temores al solsticio
Y las nubes...
Se enraízan con la materia de su fragancia
Coronando con rubíes, zafiros y esmeraldas
La notoria esencia de su nostalgia


Viento Serena
(Lala©2011)